«Si algo funciona, no lo toques». Se podría decir que los responsables de Facebook tienen este dicho popular tachado en rojo en las paredes de la oficina. Con marcador extra grueso. Y con saña. Para la red social de Zuckerberg, el cambio es la demostración de seguir vivo y lo demuestran de nuevo con el rediseño de las páginas de empresa de Facebook, que ya está disponible y que será obligatorio a partir del 30 de marzo.
A partir de ahora las páginas de empresa adoptan una apariencia muy similar a la Cronología que los usuarios ya han tenido la oportunidad de incorporar a sus perfiles desde hace un tiempo. Estas son las novedades más significativas:
- Cambio estético. La incorporación de la foto de portada en la parte superior de la página y el nuevo diseño de la foto de perfil le otorgan una mayor importancia al aspecto visual. El diseño de la foto de portada debe ajustarse a una serie de restricciones por parte de Facebook (sin mensajes comerciales, ni url, ni llamada a la acción) pero ofrece mayores posibilidades gráficas para la marca.
- Las pestañas desaparecen del menú lateral y se sitúan bajo la foto de portada. Se reduce el número de las apps que se muestran (solo cuatro), y al resto se accede mediante un menú desplegable, lo que obligará a escoger con cuidado qué pestañas queremos enseñar al usuario en primera instancia. Se pueden reordenar excepto la primera, que siempre será «Fotos» por defecto. Los iconos son personalizables y aumentan de tamaño. Importante: no se puede predeterminar una pestaña de aterrizaje a nuestra página, así que habrá que buscar alternativas a las landing pages que se han usado hasta la fecha.
- Aumenta el control sobre los mensajes que emitimos. Es posible fijar una actualización durante un máximo de 7 días en lo alto de la Cronología, lo que permite enfatizar un mensaje determinado. También se puede doblar a lo ancho el tamaño de una actualización, algo que contribuye a la importancia que el aspecto gráfico gana en todos estos cambios.
- Dos apuntes finales: la Cronología se puede completar con Hitos de la marca desde su nacimiento hasta el día de hoy y los usuarios ya pueden enviarle mensajes privados a las páginas.
Para saber cómo afectarán finalmente esta serie de modificaciones a las páginas de empresa y a su marketing, deberá pasar un tiempo para aprender del prueba/error. Pero la mayor incógnita está aún por despejar: ¿cómo reaccionará el usuario a tanto cambio? Al fin y al cabo las páginas existen para que el usuario las disfrute y establezca un vínculo con la marca. Él tendrá la última palabra.